Esto Está tan Bueno que me da la Risa
Hace poco cenamos en el restaurante Artabria, uno de los que más me gustan de la ciudad. Antes de servir los aperitivos, el camarero nos ofreció un entrante cortesía de la casa explicando en qué consistía sin que ninguno le prestásemos demasiada atención. Podía habernos dicho ‘sepan que voy a frotar el recogemigas contra mi jorquer y luego lo pasaré por su mesa’ y hubiésemos asentido igual que hicimos mientras ponía los recipientes delante de nuestras narices
¿Qué ha dicho que era esto?
No lo sé, vamos a probarlo
Lo probamos, lo probé, y aquello estaba tan rico que me dio la risa. Me dio la risa
Mis concomensales, o como se denomine a los que comían conmigo, creyeron que se trataba de una sobreactuación a mantel puesto, pero iba en serio y con honestidad. No es la primera vez que me sucede, quizás también a ti, que algo está tan bueno y llega tan inesperado que cuando empieza a chasquear en la boca no es que ponga voz de asombro ni cara de zambón, es que me da la risa
Está tan bueno que me da la risa
En concreto el plato era una espuma de espárragos con trozos de lacón y algo de chorizo, y me provocó una risilla nasal y solté ‘Dios, estu está buenísimu’, porque con la emoción se me cerró el acento gallego
Vilque, hay días que sinceramente vengo de mal café y leer este tipo de cosas hacen que me parta y me caiga de la silla. Literalmente http://www.facebook.com/video/video.php?v=1189599313970
Manu R.